Uno cree en las reglas y reglamentos y el otro las inventa.

Tres semanas en Nueva York con el apoyo de la INTERPOL, un policía de Berlín no dejará pasar la oportunidad.

Schwarz es el afortunado, quien es enviado para aprender las técnicas más exitosas de la policía de Nueva York (NYPD).

Lo primero que aprende es que las reglas no necesariamente se respetan: McMurphy el típico policía "macho" quien esta a cargo de Schwarz considera que las reglas policíacas no son más que simples consejos.

En una persecución de pandilleros, Samantha, la compañera de McMurphy es asesinada por una sexy rubia con su potente arma de fuego. Al rastrear el arma se da cuenta que fue manufacturada en Alemania.

Schwarz se regresa a Alemania con McMurphy, ahí ellos descubren una red de contrabando de armas que está aparentemente controlado por la "Princesa guerrera" y quien obtiene el cargamento derectamente de la policía de Berlín.

Aunque Schwarz esta impaciente por decírselo a su jefe, McMurphy lo convence que aplique  los métodos neoyorkinos a este caso. Esta es una decisión inteligente que salva sus vidas.